ESCOLIOSIS

La escoliosis es la alteración de la columna vertebral caracterizada por una desviación o curvatura anormal en el sentido lateral, en una vista anterior o posterior de la columna.
En la mayoría de los casos no se conoce la causa de la escoliosis. Generalmente se desarrolla durante la infancia, antes de la pubertad, y puede no ser diagnosticada hasta la adolescencia. Se clasifica la escoliosis con base en la edad en el momento del diagnóstico:
Escoliosis adolescente – 11-17 años de edad
Escoliosis juvenil – 3-10 años de edad
Escoliosis infantil – menor de 3 años de edad. Esta forma puede ser consecuencia de defectos de nacimiento, enfermedades en los nervios y músculos (distrofia muscular o parálisis cerebral), lesiones, infecciones y tumores.
Ocasionalmente, se debe a un desequilibrio muscular en lugar de una deformidad de la columna vertebral. En otros casos, esta enfermedad se genera a causa de un factor genético.
En la mayoría de los casos no se conoce la causa de la escoliosis. Generalmente se desarrolla durante la infancia, antes de la pubertad, y puede no ser diagnosticada hasta la adolescencia. Se clasifica la escoliosis con base en la edad en el momento del diagnóstico:
Escoliosis adolescente – 11-17 años de edad
Escoliosis juvenil – 3-10 años de edad
Escoliosis infantil – menor de 3 años de edad. Esta forma puede ser consecuencia de defectos de nacimiento, enfermedades en los nervios y músculos (distrofia muscular o parálisis cerebral), lesiones, infecciones y tumores.
Ocasionalmente, se debe a un desequilibrio muscular en lugar de una deformidad de la columna vertebral. En otros casos, esta enfermedad se genera a causa de un factor genético.
BIBLIOGRAFIA:
COMENTARIO:
Existen tres causas generales de escoliosis:
Escoliosis congénita debido a un problema en la formación de las vértebras o costillas fusionadas durante el desarrollo prenatal.
Escoliosis neuromuscular causada por problemas tales como control muscular deficiente, debilidad muscular o parálisis debido a enfermedades como parálisis cerebral, distrofia muscular, espina bífida y polio.
Escoliosis idiopática de causa desconocida y que aparece en una columna que previamente estaba derecha.
La escoliosis idiopática en adolescentes es el tipo más común. Algunas personas pueden ser propensas a presentar curvatura en la columna. La mayoría de los casos de escoliosis se presenta en niñas y el encorvamiento generalmente empeora durante el período de crecimiento. Los casos de escoliosis infantil y juvenil son menos comunes y normalmente afectan a un número similar de chicos y chicas.
Se puede sospechar de una escoliosis cuando uno de los hombros parece estar más alto que el otro o la pelvis parece estar inclinada, sin embargo, las personas sin entrenamiento generalmente no pueden notar la curvatura.
Hoy en día se están haciendo controles médicos rutinarios para la detección de escoliosis en las escuelas primarias y secundarias, y se están detectando tempranamente muchos casos que antes hubieran pasado inadvertidos hasta estar muy avanzados.
Puede haber fatiga en la columna luego de mucho tiempo de estar sentado o parado. Si hay irritación, el dolor puede ser persistente. Cuanto más grande sea la curva inicial de la columna, mayor será la posibilidad de empeoramiento de la escoliosis después de completarse el crecimiento. Las escoliosis severas (curvaturas en la columna mayores a los 100º) pueden causar problemas respiratorios.
Existen tres causas generales de escoliosis:
Escoliosis congénita debido a un problema en la formación de las vértebras o costillas fusionadas durante el desarrollo prenatal.
Escoliosis neuromuscular causada por problemas tales como control muscular deficiente, debilidad muscular o parálisis debido a enfermedades como parálisis cerebral, distrofia muscular, espina bífida y polio.
Escoliosis idiopática de causa desconocida y que aparece en una columna que previamente estaba derecha.
La escoliosis idiopática en adolescentes es el tipo más común. Algunas personas pueden ser propensas a presentar curvatura en la columna. La mayoría de los casos de escoliosis se presenta en niñas y el encorvamiento generalmente empeora durante el período de crecimiento. Los casos de escoliosis infantil y juvenil son menos comunes y normalmente afectan a un número similar de chicos y chicas.
Se puede sospechar de una escoliosis cuando uno de los hombros parece estar más alto que el otro o la pelvis parece estar inclinada, sin embargo, las personas sin entrenamiento generalmente no pueden notar la curvatura.
Hoy en día se están haciendo controles médicos rutinarios para la detección de escoliosis en las escuelas primarias y secundarias, y se están detectando tempranamente muchos casos que antes hubieran pasado inadvertidos hasta estar muy avanzados.
Puede haber fatiga en la columna luego de mucho tiempo de estar sentado o parado. Si hay irritación, el dolor puede ser persistente. Cuanto más grande sea la curva inicial de la columna, mayor será la posibilidad de empeoramiento de la escoliosis después de completarse el crecimiento. Las escoliosis severas (curvaturas en la columna mayores a los 100º) pueden causar problemas respiratorios.
CONCLUSIONES: El término se refiere a la desviación lateral de la columna vertebral. La palabra viene del griego "Skoliosis", que significa joroba. Esta desviación está acompañada de rotación de los cuerpos vertebrales, por lo que se dice que la escoliosis es una deformidad tridimensional
Existe también escoliosis asociada a enfermedades como la Neurofibromatosis, Síndrome de Marfan, Duarfismo, Infecciones, Trastornos metabólicos
RECOMENDACIONES:
El tratamiento depende de la causa de la escoliosis, el tamaño y la localización de la curva y de qué tanto crecimiento se espera del paciente. La mayoría de los casos de escoliosis idiopática en adolescentes (menos de 20 grados) no requieren tratamiento, pero se les debe hacer un seguimiento frecuente, aproximadamente cada 6 meses.
A medida que las curvas empeoran por encima de los 25 a 30 grados en un niño que aún está creciendo, generalmente se recomienda el uso de un dispositivo ortopédico (corsé) para ayudar a disminuir la progresión de la curva. Se utilizan muchos tipos diferentes de dichos dispositivos que tienen nombres como el corsé Boston, corsé Wilmington, corsé Milwaukee y corsé Charleston, según los centros en los que fueron desarrollados.
Cada corsé o dispositivo ortopédico tiene una apariencia diferente y hay diferentes formas de utilizar cada tipo adecuadamente. La selección de un corsé y la manera de utilizarlo está determinada por muchos factores, que incluyen las características específicas de la curvatura del paciente. La decisión acerca del corsé exacto será tomada por el paciente y el médico.
Los corsés para la espalda no detienen el crecimiento de la curva, sino que utilizan presión para ayudar a enderezar la columna y se pueden ajustar durante el crecimiento. Estos dispositivos no funcionan en los casos de escoliosis congénita o neuromuscular y son menos efectivos en los casos de escoliosis idiopática infantil o juvenil.
Por lo general, una curvatura de la columna de 40 grados o más requiere una cirugía para su corrección, debido a que las curvas tan pronunciadas presentan un elevado riesgo de empeorar aún después de detenerse el crecimiento óseo. La cirugía implica corregir la curvatura (aunque no toda) y fusionar los huesos en la curva. Los huesos se mantienen en su lugar con una o dos varillas de metal sostenidas con ganchos y tornillos hasta que el hueso sane. Algunas veces, la cirugía se efectúa a través de un corte hecho en la espalda, en el abdomen o por debajo de las costillas. Puede ser necesario un corsé o dispositivo ortopédico después de la cirugía para estabilizar la columna vertebral.
Las limitaciones impuestas por los tratamientos tienden a ser emocionalmente difíciles y pueden perjudicar la imagen de sí mismo, sobre todo en los adolescentes. Por lo tanto, es importante el apoyo emocional para ajustarse a estas limitaciones.
Los fisioterapeutas y los ortopedistas (especialistas en aparatos ortopédicos) pueden ayudar a explicar los tratamientos y asegurarse de que el corsé o dispositivo ortopédico quede ajustado en forma cómoda.
El tratamiento depende de la causa de la escoliosis, el tamaño y la localización de la curva y de qué tanto crecimiento se espera del paciente. La mayoría de los casos de escoliosis idiopática en adolescentes (menos de 20 grados) no requieren tratamiento, pero se les debe hacer un seguimiento frecuente, aproximadamente cada 6 meses.
A medida que las curvas empeoran por encima de los 25 a 30 grados en un niño que aún está creciendo, generalmente se recomienda el uso de un dispositivo ortopédico (corsé) para ayudar a disminuir la progresión de la curva. Se utilizan muchos tipos diferentes de dichos dispositivos que tienen nombres como el corsé Boston, corsé Wilmington, corsé Milwaukee y corsé Charleston, según los centros en los que fueron desarrollados.
Cada corsé o dispositivo ortopédico tiene una apariencia diferente y hay diferentes formas de utilizar cada tipo adecuadamente. La selección de un corsé y la manera de utilizarlo está determinada por muchos factores, que incluyen las características específicas de la curvatura del paciente. La decisión acerca del corsé exacto será tomada por el paciente y el médico.
Los corsés para la espalda no detienen el crecimiento de la curva, sino que utilizan presión para ayudar a enderezar la columna y se pueden ajustar durante el crecimiento. Estos dispositivos no funcionan en los casos de escoliosis congénita o neuromuscular y son menos efectivos en los casos de escoliosis idiopática infantil o juvenil.
Por lo general, una curvatura de la columna de 40 grados o más requiere una cirugía para su corrección, debido a que las curvas tan pronunciadas presentan un elevado riesgo de empeorar aún después de detenerse el crecimiento óseo. La cirugía implica corregir la curvatura (aunque no toda) y fusionar los huesos en la curva. Los huesos se mantienen en su lugar con una o dos varillas de metal sostenidas con ganchos y tornillos hasta que el hueso sane. Algunas veces, la cirugía se efectúa a través de un corte hecho en la espalda, en el abdomen o por debajo de las costillas. Puede ser necesario un corsé o dispositivo ortopédico después de la cirugía para estabilizar la columna vertebral.
Las limitaciones impuestas por los tratamientos tienden a ser emocionalmente difíciles y pueden perjudicar la imagen de sí mismo, sobre todo en los adolescentes. Por lo tanto, es importante el apoyo emocional para ajustarse a estas limitaciones.
Los fisioterapeutas y los ortopedistas (especialistas en aparatos ortopédicos) pueden ayudar a explicar los tratamientos y asegurarse de que el corsé o dispositivo ortopédico quede ajustado en forma cómoda.
1 comentario:
el segundo articulo no tiene nada que ver con la musica. seria bueno que cambiaras el titulo para este articulo.
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